lunes, 27 de marzo de 2006

CAMPAÑA UN MILLON DE FIRMAS POR EL DERECHO AL VOTO



La AISB, considera justo que no solamente puedan votar en las Elecciones municipales del 2007, los Nacionales de un Estado Miembro de la Unión Europea, sino cualquier Residente de un Tercer Estado, aunque éste no sea país integrante de la UE.

¿Por que los Iberoamericanos residentes, y que aún no cuentan con la Nacionalidad, no puede elegir a sus políticos locales?, ¿y los nacionales de la Antigua URSS?, acaso, no pagan sus impuestos y residen formando riqueza, y le negamos un derecho que debiera estar reconocido en la Constitución Europea.

Por ello, desde este blog particular, les hago eco de la campaña, que la AISB, está enviando a todos los que puedan hacer algo para sumar mas firmas, y poder enviarlas a su destino en Bruselas.
Saludos,

La Mirada D MartínSierra
Pásalo, ahora que está de moda...

UN MILLÓN DE FIRMAS
http://www.fidh-ae.org/petition_million/petition-million.htm
Sindicatos y ONG lanzan una campaña por el derecho al voto de los residentes en la Unión Europea.

El proyecto de Constitución Europea, así como los tratados anteriores, impiden el derecho al voto en las elecciones municipales y europeas de millones de personas de otras nacionalidades que cuentan con permiso de residencia.

En tanto que el Tratado de Mastrich y el Tratado Constitucional estipulan que será ciudadano de la Unión Europea "toda persona que ostente la nacionalidad de un Estado miembro", millones de personas con residencia legal no pueden votar en las elecciones europeas y, en la mayoría de los casos, tampoco en las municipales.

Con el apoyo de 286 organizaciones de los 25 países del Unión Europea, la campaña “Para una ciudadanía europea de residencia” ya ha recogido casi 100.000 firmas –especialmente en España, Bélgica, Portugal y Francia- para que se reconozca este derecho al voto de los inmigrantes y para que la atribución de la ciudadanía no se circunscriba a la nacionalidad.

El objetivo de la campaña es reunir un millón de firmas–número contemplado en el proyecto de Constitución Europea para exigir una acción de la Comisión- para la modificación del propio texto constituyente que limita la ciudadanía sólo a los que ostentan la nacionalidad de un Estado miembro.

En España, participan en esta campaña organizaciones como la Asociación Pro Derechos Humanos de Andalucía (APDHA), SOS Racismo, Red Acoge y numerosas plataformas ciudadanas locales y autonómicas. Durante el pasado año, recogieron unas 50.000 firmas que, además de sumarlas a la campaña, las remitieron a los grupos parlamentarios del Congreso.

Según APDHA, esta acción “permitió abrir el debate público sobre los derechos de ciudadanía, hasta hoy circunscrito a pequeños sectores intelectuales y algunos colectivos”.
Situaciones paradójicas en España

Esta situación puede resultar aún más paradójica en los procesos electorales nacionales y autonómicos de España, ya que muchos hijos de emigrantes españoles en otros países pueden votar en elecciones autonómicas, mientras que inmigrantes residentes en España legalmente durante años no cuentan con este derecho.

El periodista de La Voz de Galicia, Lois Blanco, exponía recientemente en un artículo de opinión las paradojas del derecho al voto: “Si un nieto de un oriundo de Castro Caldelas (Ourense) llega a Barajas y se queda doce meses en el barrio madrileño de Lavapiés antes de regresar a Buenos Aires, puede elegir al presidente de la Xunta. Los inmigrantes caboverdianos que viven, trabajan y pagan impuestos en Burela (Lugo) deben esperar, en cambio, diez años”.

Una situación tanto más extraña si se tiene en cuenta que Galicia es el único territorio de España en el que el censo de residentes ausentes (306.000 personas) es mayor que el de cualquiera de sus ciudades.

UN MILLÓN DE FIRMAS para una CIUDADANÍA EUROPEA DE RESIDENCIA sin mirar el país de procedencia.
El proyecto de Constitución de la Unión europea así como los tratados anteriores estipulan que será ciudadano de la Unión europea "toda persona que ostente la nacionalidad de un Estado miembro". Está disposición que excluye de la ciudadanía de la Unión a 15 millones de personas, naturales de Terceros Estados, es inaceptable para nosotros, tanto hoy como ayer.

Si la Constitución se aprobase, se calcula (Art.1-46-4) que un millón de ciudadanos (como mínimo) de varios Estados miembros podrían solicitar una acción de la Comisión. Por todo ello lanzamos la presente petición que pretende recoger más de un millón de firmas en distintos países de la Unión para pedir una nueva definición de la Ciudadanía europea: "Será ciudadano de la Unión toda persona residente en el territorio de un Estado miembro o que ostente la nacionalidad de un Estado miembro".
Independientemente del futuro del proyecto de Constitución, las firmas se entregarán a lo distintos gobiernos de la Unión, a la Comisión y al Parlamento europeo.
Créditos: Texto recogido de la Web del Grupo Municipal socialista del Ayto. Almería